ESCRIBE RAMIRO CAGGIANO BLANCO
Escribo en la víspera de las Elecciones Brasileñas (01/10/2022) que pueden enterrar bajo una montaña de votos el Proyecto de “Democracia Tutelada” por los Militares elaborado y aplicado por el actual mandatario Jair Bolsonaro, que pretende la reelección.
Las chances de Lula de ganar en la Primera Vuelta son reales, máxime si consideramos que las mayorías silenciosas pueden contribuir a ello, así como el que se denomina “VOTO VERGÜENZA”, ya que el mainstream está del lado del bolsonarismo, muchas veces fruto de la truculencia de sus discursos y de las acciones de violencia contra los simpatizantes del Partido de los Trabajadores, las que incluyen por lo menos 3 asesinatos confirmados.
Por eso muchos políticos y otras figuras públicas, históricamente enfrentadas al PT -muchos de ellos defensores del “Lava Jato” y de la ilegal destitución de Dilma Rousseff-, al no tener una “tercera opción” han manifestado su voto en el partido de izquierda para acabar con el monstruo que ayudaron a crear.
Las dos últimas encuestas publicadas hace horas, la de los institutos Datafolha e IPEC (ex Ibope), pronostican una victoria de Lula por 50% y 51% respectivamente.
Pero, más allá de las encuestas, lo que ilusiona es la pérdida de miedo de las personas en declarar que votarán a Lula de esta última semana y se animan a colmar las calles para expresarle su apoyo, como vemos en la foto que rfleja lo ocurrido el viernes 30 en la ciudad de Salvador en el estado de Bahia. Lo mismo ocurrió en San Pablo, bastión del bolsonarismo, esta mañana.
Esto no es un dato menor si tenemos en cuenta que según una encuesta, 7 de cada 10 brasileros teme sufrir agresiones por motivos políticos, casi la totalidad provenientes de un electorado bolsonarista rabioso y que se siente amenazado ante la posibilidad de la derrota.
Faltan horas para que comiencen los comicios y las encuestas son tan sólo eso: encuestas.
Sin embargo nos permitimos ilusionarnos con una victoria que permita evitar en balotaje y, de no ser así, continuar fortaleciendo la ola “LULISTA” para que en segunda vuelta podamos decir adiós a esta democracia híbrida inaugurada por Bolsonaro la que, Manu Militari, Criminaliza y persigue la participación popular, y con la que sueñan políticos autoritarios y protodictadores de América Latina.
Desde Rosario, por Argentina y para el Mundo... 