JESUS Y EL SEXO EN LA ANTIGÜEDAD

«MAGDALENA EN EXTASIS» LOUIS FINSON, SIGLO XVII

ESCRIBE FABIAN ARIEL GEMELOTTI

En la Antigüedad no había un concepto de orientación sexual pero sí un concepto de género. Una persona era hombre o mujer, pero nadie cuestionaba los gustos sexuales de otra persona. Es más, era muy común para el hombre tener esposa y un amante joven masculino, pasivo o activo. La sexualidad era muy diferente a la actual.

Las mujeres en cierta cultura gozaban de plena libertad sexual y en otras no. En las culturas del Oriente mesopotámica había libertad sexual. De esa cultura sale el mito de las amazonas. Y una mujer podía tener amantes y gozaba del placer plenamente. En Roma en el Siglo I había leyes de protección de la mujer y los ciudadanos libres gozaban de libertad sexual. Había esclavos para el sexo. Eran comunes los esclavos masturbatorios: esclavos que cumplían una sola función en una casa: masturbar al dueño y dueña. Plutarco y Virgilio hablan del tema. Y hay inscripciones en las ruinas de Pompeya donde se lee: «acá vivía un masturbador». Era muy común eso.

En la cultura hebrea también había cierta libertad sexual, pero en las clases altas. Si bien el judaísmo es muy estricto en su dogma, hubo promiscuidad en sus reyes, especialmente en David.
Salomón en los Cantares narra experiencias sexuales muy pornográficas: habla de lamer senos y vaginas. Muy común en la Biblia esa sexualidad. La clase sacerdotal no admitía la promiscuidad y no hablaba de orientación sexual, pero se da a entender que un sacerdote hebreo no tenía sexualidad o era restringida.

Jesús nace en una cultura con doble moral: el mundo romano de libertad sexual y el mundo hebreo oprimente. Jesús cuestiona la moral de su tiempo y dentro de esa moral está la sexualidad. ¿Jesús era homosexual? Si lo era o no lo era no interesa, primero porque no interesaba a su época la orientación sexual y segundo porque Jesús era hebreo y respondía a la moral de su pueblo.

Jesús era un «transgresor» de los preceptos del dogma sacerdotal: curaba los sábados (día de descanso y prohibido toda actividad en el templo y en la calle para el judío) y usaba la magia, condenada en los escritos religiosos hebreos. Seguramente Jesús tuvo sexualidad plena o por lo menos algún encuentro sexual, porque era muy común el sexo cuando se vivía rodeado de mujeres y hombres. Si fue gay o heterosexual no lo sabemos.

Los que afirman algo toman textos bíblicos y lo sacan de contexto. Pero si Jesús era «humano» y «perfecto» es casi seguro su plenitud sexual. Ser perfecto en el mundo del Siglo I era ser muy inteligente y «normal» en cuerpo y sexualidad. Y ser normal en la sexualidad era tener relaciones sexuales. Pero repito, no se puede afirmar nada porque los textos evangélicos son muy confusos y no aclaran nada, porque responden a muchos años después de haber vivido Jesús y sobre todo responden a la formación de la moral y del dogma Cristiano.

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